Titulo

Operación Serenidad 2025:
Lecciones de Puerto Rico para un Mundo en Transformación

La Operación Serenidad fue un conjunto de políticas culturales y educativas impulsadas por el gobernador Luis Muñoz Marín durante su administración en Puerto Rico, principalmente en la década de 1950. Surgió como una respuesta al intenso proceso de modernización económica y reforma política que se estaba llevando a cabo, con el objetivo de equilibrar estos cambios materiales con un desarrollo cultural y educativo que permitiera al pueblo puertorriqueño reflexionar y “serenarse” ante el ritmo acelerado del desarrollo social.

Entre las iniciativas clave de la Operación Serenidad se encuentran la creación de la División de Educación de la Comunidad (DIVEDCO) en 1949, encargada de programas de alfabetización en áreas rurales y urbanas, y el desarrollo de un taller para la producción de materiales gráficos y cinematográficos sobre temas puertorriqueños. También se fundó el Instituto de Cultura Puertorriqueña en 1955, con el propósito de preservar y difundir la cultura local. El Festival Casals, creado en 1958 para celebrar la visita del violinista Pablo Casals, fue otro pilar del proyecto, promoviendo la música clásica y el arte. Además, se establecieron los servicios de radio y televisión públicos WIPR y WIPM en 1958, que jugaron un papel fundamental en la divulgación cultural. Aunque el proyecto no logró culminar completamente, especialmente en lo referente a los servicios de radio y televisión, dejó una base cultural sólida que ha fortalecido la actividad cultural en Puerto Rico.

Se ha argumentado que la Operación Serenidad promovía un “nacionalismo cultural” —universalista y occidentalista, en contraste con el nacionalismo independentista — para enmascarar el temor oficial a los sentimientos nacionalistas que ganaban fuerza en la década de 1950 promoviendo una identidad puertorriqueña auténtica. En esta breve reflexión histórica profundizamos en cómo una auténtica identidad puertorriqueña no sólo no está reñida con el universalismo y el ocidentalismo, tan bien representados por el pensamiento hostosiano, sino que carecería de autenticidad espiritual si no contara con esos elementos.